EL VOLUMEN MÁXIMO DE OXÍGENO

El Volumen Máximo de Oxígeno VO2 MÁX

El volumen máximo de oxígeno (VO2Máx) es probablemente el parámetro fisiológico más conocido cuando se quiere evaluar la capacidad física de un deportista. Desde el punto de vista científico siempre se le ha considerado como el indicador principal  predictivo del posible rendimiento de un deportista de resistencia. Es el gold standard para la medición de la calidad de un deportista.

Primeramente,  entendamos que representa el VO2Máx. Es la medida de la cantidad máxima de oxígeno que el cuerpo es capaz de absorber transportar y consumir durante el ejercicio físico de alta intensidad.  Se mide en valores relativos al peso del deportista. Es decir, se expresa en mililitros de oxígeno por minuto por kilogramo de peso corporal. Dado que el ser humano es aeróbico y depende del oxígeno para todas sus funciones vitales podemos entender que su importancia no solo se limita el mundo deportivo sino que es usado también para evaluar la salud general de cualquier persona.

Quién no ha escuchado o leído en alguna ocasión que el consumo máximo de oxígeno de Miguel Induráin superaba los 88 mL/Kg/min en el período de mayor esplendor físico de su carrera deportiva. O que Kilian Jornet podría superar incluso los 90 mL/Kg/min .

Son datos obtenidos en pruebas de laboratorio que por su gran interés adquieren relevancia periodística. Especialmente anecdótica e ilustrativa de la componente genética del VO2MÁX fue la prueba de esfuerzo realizada al  gran ciclista navarro. El Doctor José Calabuig, responsable de las pruebas de esfuerzo en la Clínica Universitaria de Navarra, explica cómo una prueba con el ciclista navarro destrozó todos los parámetros físicos que manejaban y les obligó a invertir en una máquina que fuera capaz de medir la fuerza descomunal del a la postre pentacampeón del tour de Francia.

El conocimiento de estos datos por parte del gran público acercan al deportista popular a la élite y le permiten llevar a cabo una comparación según su sexo y edad.

Para comprender mejor su posibilidad de mejora, analicemos pormenorizadamente cada una de las variables principales de las que depende así como su posibilidad de optimización con el entrenamiento o la nutrición.

  • El gasto cardíaco máximo. Es la cantidad máxima de sangre que el corazón puede bombear en un minuto. Un mayor gasto cardíaco permitirá llegada de mayor cantidad de oxígeno los músculos consecuencia de la mayor sangre bombeada. El tamaño del corazón depende fundamentalmente de la genética y es prácticamente inalterable cuando alcanzamos la edad adulta. Sin embargo, su eficiencia sí es entrenable. Con el entrenamiento aeróbico continuado se produce un incremento del volumen de sus cavidades y los grosores parietales,  especialmente ventrículo izquierdo, lo que aumenta el volumen sistólico y por tanto el gasto cardíaco.
  • Capacidad de transporte de oxígeno. Principalmente está condicionada por dos factores: el estado vascular y la cantidad de hemoglobina sanguínea. Ambos pueden ser mejorados mediante el entrenamiento.
  • Capacidad sistema pulmonar.  La capacidad del sistema pulmonar se refiere a la capacidad de los pulmones para inhalar, procesar y exhalar aire de manera eficiente, lo que es esencial para el intercambio de gases (oxígeno y dióxido de carbono) en el cuerpo. Se pueden inducir mejoras con el entrenamiento aunque muy limitadas especialmente en la referente a la eficiencia de los músculos respiratorios.
  • Capacidad oxidativa del músculo esquelético. Depende fundamentalmente del número y eficiencia de las células mitocondriales, así como la nutrición sanguínea de las mismas mediante los capilares. El número de mitocondrias y su eficiencia se optimizan mediante el entrenamiento y además se produce un proceso llamado angiogénesis que mejora la nutrición sanguínea con la creación de más capilares y aumento de su eficiencia. Sin embargo, la genética condicionará el tipo de fibras musculares predominantes y con ellos su capacidad oxidativa máxima.

Así pues, el VO2MÁX, puede ser mejorado en función de que lo hagan el conjunto de variables fisiológicas de las que depende. Según los últimos estudios, podría mejorar entre un 15 y un 20% como máximo y siempre siguiendo un entrenamiento adecuado a lo largo del tiempo.

Como conclusión, se puede afirmar que la mejora del VO2MÁX es posible, pero no es la condición fisiológica más sensible al entrenamiento. Existen otras como la eficiencia técnica del gesto deportivo así como la metabólica cuya mejora pueden afectar más drásticamente el rendimiento, siendo a su vez con mucho más susceptibles de optimizarse mediante el entrenamiento. ¿Te gustaría que hablásemos sobre ello?.